Una pantalla más grande y la mejor batería de la nueva generación, el reclamo del último móvil de la manzana que llega al mercado
Quince años han dado para muchas batallas en la historia de los smartphones si tomamos 2007 fecha de la presentación del primer iPhone como el inicio de una nueva era en la forma en que utilizamos unas computadoras de bolsillo que llamamos teléfonos porque permiten hacer llamadas. Aquella histórica presentación de Steve Jobs en el Moscone Center de San Francisco contiene muchas de las claves de lo que vemos hoy. La nueva generación de los iPhone 14 se ha mantenido fiel a las grandes líneas conceptuales del primer día: hardware de calidad y software propio. Y en eso, los móviles de la manzana se han vuelto a poner al frente.
Desde el 2007 hasta el 2022, Apple ha lanzado 38 modelos de iPhone y, aunque la tecnología puede llevarnos en el futuro a nuevos horizontes que hoy nos resultan inimaginables, desde esa fecha no ha habido ninguna revolución en ellos. Ni tampoco en los de la competencia. La última revolución en este sector fue la del primer iPhone, pese a que algunos esperan, año tras año, una nueva revelación. No es ni tiene por qué ser así.

Apple presentó el 7 de septiembre en Cupertino cuatro nuevos modelos de iPhone: iPhone 14 y 14 Plus este no ha salido todavía al mercado el iPhone 14 Pro y 14 Pro Max. Aunque los dos primeros contienen mejoras reseñables que veremos más adelante, son los dos últimos los que abanderan la vanguardia de la tecnología móvil de la compañía californiana, los dispositivos en el que han volcado las grandes novedades de esta generación.
Con los móviles apagados, la gran diferencia notable entre los iPhone 13 Pro y los 14 Pro es su módulo de cámaras, que sigue creciendo hasta un tamaño considerable. Las medidas de las pantallas siguen siendo las mismas: 6,1 pulgadas en el iPhone 14 Pro y 6,7 pulgadas en el iPhone 14 Pro Max. Los materiales son cristal y acero. En eso, la marca de la manzana sigue fiel al espíritu de su fundador. Si lo dudan, busquen cualquier grabación en la que Jobs diga la palabra “plástico” y fíjense con qué desprecio lo dice.

En los iPhone en general, pero en los Pro de forma más acentuada, los materiales son de gran calidad. Sin una funda de por medio, todo lo que llega al tacto es cristal y acero. Sin componentes prémium no hay dispositivo prémium. Y a eso es a lo que aspira el móvil de Apple, su mayor fuente de ingresos directa (por las ventas de dispositivos) e indirecta (por los servicios que ofrece dentro de su ecosistema con el teléfono en el centro de todo).
Proporcionado por lavanguardia.com – La noticia completa aquí
AndreaB. – Asistente Web Digital
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