Las confesiones de Ayuso en medios afines siempre dejan alguna que otra perla.
Recuerde sino aquella legendaria mater dolorosa que protagonizó en El Mundo, una entrevista convertida ya en toda una oda a la ignominia con declaraciones que mezclan el sentimentalismo más vacuo con los rigores del libremercado.
Ayuso vuelve, esta vez en El Español, con otra de esas entrevistas a placer en las que deja a un lado su vertiente más macarra y abraza la sensiblería casposa. “Vivo con la preocupación diaria de tener 7 millones de hijos y es precioso”, ha tenido a bien pronunciar en la citada entrevista.
De modo que si usted, querido lector, por algún casual consta de empadronamiento en Madrid, pasaría a convertirse de forma automática en un vástago de Ayuso. Algo que, aún en sentido figurado, inquieta (e incluso conmociona) al más pintado.
Las redes, como era de prever, han querido mostrar su estupor para con la presidenta de la Comunidad de Madrid
Extraña madre la que encarna Ayuso. Tal y como apunta uno de los tuiteros, estamos ante una madre que, en lugar de fomentar el entendimiento entre sus hijos, se encarga de azuzar el odio y privilegiar a unos frente a otros.
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AndreaB. – Asistente Web Digital
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